Los grandes empresarios catalanes ligados a Banc Sabadell desde hace 12 años rompieron en Nochebuena el pacto de accionistas que protegía la entidad contra la entrada de nuevos inversores e, incluso, ante hipotéticas opas.

Así, dan por concluído de forma anticipada una alianza que limitaba la transmisión de sus acciones a terceros; aunque también es cierto que éstas se han diluido con el paso de los años tras sucesivas ampliaciones de capital. 

Quizá por ello, el Sabadell informó este lunes en un hecho relevante enviado a la CNMV  de que los firmantes que pudieran ser titulares aún de acciones afectadas por dicho acuerdo habían comunicado que deciden "dejarlo sin efecto al haberse alcanzado los objetivos que motivaron su suscripción".

Entre los apellidos de referencia se encuentran el propio presidente del Sabadell, Josep Oliu y otros empresarios catalanes como la familia Lara, de Planeta; Héctor Colonques, de Porcelanosa; o Isak Andic, de Mango.

El pacto parasocial se firmó el 27 de julio de 2006. Se renovó en 2016 y debía extenderse hasta 2021, de acuerdo a los datos de Europa Press. Con el 50% del banco en manos de distintos inversores institucionales, se abre la puerta a que uno de ellos decida pujar por el control mayoritario del grupo. De hecho, suelen participar en este tipo de operaciones.

Blackrock, con el 5,32%, es el accionista principal del Sabadell, seguido de Norges Bank (3,17%) y de Fintech Europe  -el brazo inversor del mexicano David Martínez Guzmán-, que posee el 3,10%.

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