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La dirección elude concretar cómo afectarán a la caja alicantina los recortes de personal y de oficinas previstos tras la creación del grupo.
D. NAVARRO ALICANTE
Primero fue el consejo de administración y ahora son los sindicatos de la CAM los que se resisten a ceder parte de su soberanía. El 66% de la representación de la plantilla -Sicam, CGT, Alta, NG y Sindicato Vietnamita- se negó ayer a constituir una única mesa de negociación, conjunta con el resto de entidades, para acordar las condiciones laborales del SIP que la entidad alicantina creará junto a Cajastur y las cajas de Cantabria y Extremadura.
Sólo UGT, CC OO y Cesica respaldaron la propuesta de la dirección de la CAM, que en todo momento eludió concretar las repercusiones que esta "fusión virtual" tendrá sobre la red de oficinas y los trabajadores. De hecho, al encuentro no acudió ninguno de los máximos ejecutivos de la caja -los que participaron en las negociaciones del SIP- y la entidad estuvo representada por el director de Gestión de Recursos Humanos, Eduardo Severá, y la jefa de Relaciones Laborales, Lucía Beltrán.
Tras rechazar la propuesta de la dirección, los citados sindicatos reclamaron, por el contrario, la constitución de una mesa exclusiva para la Caja Mediterráneo a partir del próximo 16 de agosto. "Primero queremos un acuerdo aquí, que se pacte cómo quedará la plantilla y en qué condiciones, y luego ya se verá si es posible alcanzar otro acuerdo conjunto para las cuatro cajas", señaló ayer el secretario general del Sicam, Manuel Navarro.
En este sentido, las primeras estimaciones hablaban de la necesidad de recortar en un 11,9% el personal del futuro grupo, lo que supondría la destrucción de entre 700 y 900 empleos en la CAM. Ayer, sin embargo, Severá y Beltrán se limitaron a reconocer "que habrá afectación pero sin aportar ningún dato ni ningún documento", apuntaba, indignado, el portavoz de CGT, Ventura López.
CC OO y UGT, por su parte, consideraron "un error" la decisión de sus compañeros ya que "al final las condiciones laborales tendrán que ser las mismas en todas las entidades del SIP", se lamentaba Jorge Casillas, de CC OO. "Habrá que esperar a ver qué sucede el día 16 pero, por mucho que se empeñen, habrá un acuerdo conjunto", apuntaba el secretario general de la sección de UGT en la caja, Federico Pastor. En todo caso, los representantes de los trabajadores confían en llegar a un acuerdo, aunque sea de mínimos, antes de que el próximo 24 de septiembre las asambleas de las cajas aprueben definitivamente el SIP.
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