- La CNMC recibe un aluvión de cartas de empresarios preocupados por la posible fusión de Sabadell con BBVA, según elEconomista.
- La patronal catalana de pymes, Pimec, dice que la operación supondría una merma del 8% del crédito, que se valora en 54.000 millones de euros.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ya ha recibido las primeras alegaciones de terceros, antes de pasar a la fase dos del proceso de autorización de la opa de BBVA sobre Sabadell, según elEconomista.
Después de que la patronal de pymes de Cataluña, Pimec, advirtiera al supervisor que la operación de fusión de los dos bancos supondría una merma del 8% del crédito (valorado en 54.000 millones de euros), algunas CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales) regionales han decidido compartir su preocupación.
Foment, la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), junto a las provinciales de Lugo, Orense y La Coruña —y, más adelante la Federación Asturiana de Empresarios (Fade) y la Cámara de Comercio de Valencia— están siguiendo sus pasos, informa el medio.
"Nosotros remitimos un escrito a la CNMC con los inconvenientes que vemos a la opa, fundamentalmente por la concentración del crédito y el riesgo de que se aminore. Todo lo que conlleva tener un partner financiero menos en Galicia es muy importante, sobre todo para la pyme", explica a elEconomista Juan Manuel Vieites, presidente de CEG.
Josep Sánchez Llibre, al frente de la patronal catalana Foment, ha señalado también que en los anteriores procesos de fusión multitud de empresas vieron reducidas sus líneas de crédito, y el crédito en general, resultando un nuevo límite inferior a la suma de las dos anteriores.
"Actualmente se agrava dado el alto nivel de concentración bancaria, mucho más elevado y relevante que antaño, lo que dificulta, especialmente para las empresas de pequeña dimensión, tener esos volúmenes de crédito con otras entidades financieras", recoge la carta de la CNMC que ha enviado la patronal y que ha publicado La Vanguardia.
elEconomista añade otro dato: el 42% de las oficinas de Sabadell se encuentran a menos de 200 metros de una de BBVA y el porcentaje sube al 75% en distancias de 500 metros. Y la CNMC ya ha dicho que analizará código postal a código postal —como hizo con CaixaBank o Unicaja y Liberbank—.
El movimiento de BBVA es una apuesta por las pymes
El banco con sede en Bilbao ve tal atractivo en la operación que, incluso si se prohíbe la fusión por la oposición del supervisor o el Gobierno, la opa es atractiva. Aunque ha reconocido que podría no salir adelante o implicar un coste económico superior al previsto.
BBVA ha insistido en reiteradas ocasiones en que precisamente son las pymes uno de los principales motivos por los que quiere comprar Sabadell. Y se ha comprometido a mantener el crédito a corto plazo para todas las pymes.
"Atender a pymes y autónomos es una prioridad para BBVA. Es importante entender los retos a los que se enfrentan para ayudarles a crecer e invertir", ratificaba el presidente de la entidad, Carlos Torres Vila, en la presentación del XLI Seminario de APIE: El rol de las empresas en la nueva economía.
"La operación es una clara apuesta por las pymes que reforzará aún más nuestro compromiso con estas empresas. Tras la integración, tenemos el compromiso de mantener durante al menos 12 meses las líneas de circulante de las pequeñas y medianas empresas", concluía.
El banco ha captado 27.000 pymes y 24.100 autónomos en los cuatro primeros meses del año, esto supone un crecimiento interanual del 11% y del 8,6%, respectivamente. |