Jaume Guardiola, durante la presentación de resultados semestrales.

El Banc Sabadell ultima la designación de César González-Bueno como consejero delegado de la entidad, en sustitución de Jaume Guardiola, según ha dado a conocer la agencia Bloomberg y han confirmado fuentes conocedoras del nombramiento que previsiblemente se llevará al consejo de administración del banco en la sesión que tendrá lugar este jueves. La salida de Guardiola se anunciará posteriormente de forma oficial. El número dos de la entidad financiera de origen vallesano optará por la jubilación y, por tanto, por la salida del banco del cual se retira con un plan de pensiones superior a los 20 millones de euros.

Aunque la entidad financiera ni confirmó ni desmintió ayer el relevo, lo cierto es que de alguna manera ya lo apuntó al comunicar su nuevo plan estratégico en solitario a raíz de la ruptura con el BBVA para la integración de ambos bancos. En ese momento, el Sabadell anunció se concentraba en su proceso de digitalización, en las pymes y clientes de valor y en una nueva estrategia internacional. González-Bueno ya responde al nuevo perfil requerido, en tanto que es uno de los pioneros de la banca digital en España. Su elección forma parte de un proceso que no se improvisa en dos semanas, apuntan fuentes consultadas, pero también es cierto que no es un desconocido para el Sabadell, puesto que en estos momentos es consejero de la filial británica TSB, que se encuentra en proceso de venta,

González-Bueno comenzó su andadura en ING en 1998 como primer consejero delegado del banco en España, cuando aún se llamaba ING Direct, antes de ir ampliando sus responsabilidades con roles en diferentes regiones y hasta alcanzar el cargo de responsable de Retail Banking Direct & International. El banquero abandonó ING en el 2011 para continuar su carrera como consejero delegado de Novagalicia Banco, en cuya reestructuración y privatización colaboró. En el 2014 comenzó a trabajar también como consejero delegado en Gulf Bank of Kuwait.

Segunda etapa

Su segunda etapa en el banco naranja llegó en el 2017, cuando fue nombrado consejero delegado de ING España y Portugal, en sustitución de Peter Staal. No obstante, este paso por la entidad apenas duró dos años, ya que el grupo eligió en el 2019 a Roel Huisman para asumir esta responsabilidad. Hasta el pasado mes de mayo, era presidente del consejo asesor de la entidad.

González-Bueno, que cuenta con una amplia experiencia en banca minorista y corporativa y de inversión, así como en la gestión de entidades financieras, inició en marzo de este año el primer acercamiento al Banco Sabadell. El directivo, que pasará a ocupar la responsabilidad de consejero delegado del Banc Sabadell, fue elegido por el fondo Oaktree como presidente de Solvia Desarrollos Inmobiliarios (SDIN) Residencia. Esta promotora pertenecía a la entidad de origen catalán y fue vendida en el 2019 por 882 millones de euros, aunque su transmisión del 100% se completó el pasado mes de septiembre. 

El relevo se produce después de la fallida operación de integración entre el banco de origen vallesano y el BBVA. Su marcha, sin embargo se desvincula de esa negociación, que fue liderada por el presidente Josep Oliu. El consejero delegado habría quedado fuera de la alta dirección de nuevo banco, según trascendió en su momento, si hubieran fructificado las negociaciones. Y habría optado por la jubilación. Guardiola (Barcelona, 1957) se incorporó al Banco Sabadell como director general el 1 de septiembre del 2007 en sustitución de Joan Maria Nin, que poco antes se unió a La Caixa como director general. Así, el banco presidido por Josep Oliu ''robó'' a la segunda entidad financiera española, el BBVA, el que entonces era el tercer hombre en la jerarquía del grupo, con la responsabilidad del negocio en España y Portugal.

La trayectoria de Guardiola

Oliu buscaba en el número dos de Sabadell un profesional de alto prestigio, con trayectoria internacional y que fuera catalán. Guardiola cumplía los requisitos. Nació en Barcelona. Inició su trayectoria profesional en 1985 como director regional de banca industrial del ya desaparecido Banco de Bilbao para Catalunya y Baleares. En 1993 se incorporó a la alta dirección del BBV como subdirector general y, dos años más tarde, fue nombrado director general de Banca Catalana.

En el 2000 se trasladó a Latinoamérica para dirigir la filial de BBVA en Puerto Rico. Un año más tarde asumía la vicepresidencia ejecutiva y la gerencia de Banco Francés en Argentina. En enero del 2003 fue nombrado primer ejecutivo de Bancomer. Dichas filiales, conjuntamente con la de Puerto Rico, aportaban más del 40% de los beneficios del BBVA, durante su mandato desde el 2003. Y le valió que el presidente del banco, Francisco González le nombrará responsable del banco en España en el 2006. No estuvo mucho tiempo. Oliu vio en él el perfil adecuado para guiar las pretensiones internacionales del banco de origen vallesano, aunque desde Barcelona. De hecho, la posibilidad de acudir con cierta frecuencia al palco del Camp Nou --es socio del FC Barcelona-- fue uno de los argumentos que tuvo en cuenta a la hora de aceptar la propuesta de Oliu.

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