Oficina de Banco Sabadell. Europa Press

Banco Sabadell quiere seguir su camino en solitario durante mucho tiempo y por eso ha puesto en marcha un nuevo plan estratégico con el que poder hacer aumentar la rentabilidad del grupo, que se encuentra en horas bajas desde que el banco sufrió la crisis informática de su filial británica, TSB en 2018.

Una de las formas más eficaces de conseguir que los números cuadren pasa por hacer un reducción de plantilla. Y eso es lo que está haciendo la entidad actualmente. En lo que va de año, el Sabadell ha abierto diferentes procesos de salidas voluntarias y expedientes de regulación de empleo (ERE) tanto en España como en Reino Unido.

Esto ha dado como resultado que el grupo catalán haya puesto fin a su relación contractual con uno de cada cinco empleados que trabajaban en Sabadell en 2020. En cifras, esto se traduce en una reducción del 19,6% de la fuerza laboral. De los 23.458 empleados en 2020 a los actuales 18.857.

A comienzos de 2021, la entidad que dirige César González-Bueno acometió un plan de bajas incentivadas para 1.800 trabajadores en España y de forma paralela, en TSB se realizó un ajuste de plantilla de 900 empleados más.

Esta misma semana, el banco ha comunicado a los sindicatos que dichos esfuerzos han sido insuficientes y por ello se ha abierto una nueva negociación con éstos para poner en marcha un nuevo ERE para 1.900 empleados en España, el 13% de la plantilla en el mismo país.

Como es habitual en esta entidad, se pretende que las negociaciones se hagan de manera rápida y se espera que se consiga el 100% de la voluntariedad en este nuevo recorte de plantilla, que se cerrará a mediados de octubre.

El grupo dirigido defiende que este nuevo recorte de plantilla es necesario para poder continuar con el proyecto, ya que el negocio no se sustenta técnicamente en términos de rentabilidad. Y es que el ROE del banco se sitúa actualmente alrededor del 3% frente al coste de capital que es superior al 9%

Con esta nueva estrategia el banco pretende ahorrar 100 millones de euros en 2022 y conseguir que el coste total no supere los 2.900 millones de cara a finalizar dicho plan. Banco Sabadell busca alcanzar una rentabilidad (ROTE) por encima del 6% de cara al 2023 -cerró el 2020 en el 0,02%- y lo hará basándose en un nuevo modelo de negocio más centrado en la banca de empresas y transformando la banca retail hacia una 100% digital en la que los préstamos al consumo, los medios de pago y cuentas corrientes no se tramiten en las oficinas.

Beneficio frente a rentabilidad

Banco Sabadell obtuvo un beneficio de 220 millones de euros en el primer semestre del año, un 51,5% más que en 2020, por la mejora del margen y la reducción de costes.

El grupo creció en el primer semestre del año en inversión crediticia y ha contado con la aportación positiva de TSB, su filial británica, que ganó 50 millones de libras (unos 58,8 millones de euros) hasta junio tras su plan de ajuste, que prevé cerrar antes de lo previsto.

Los ingresos del negocio bancario, que engloban el margen de intereses y las comisiones netas, alcanzaron los 2.395 millones a cierre del segundo trimestre, un 0,7% más que el año pasado.

En concreto, el margen de intereses se situó en los 1.685 millones, un 1,1% interanual menos, mientras que las comisiones netas sumaron 709 millones, un 5,4% más, por el buen comportamiento de los servicios asociados a cuentas a la vista, tarjetas y fondos de inversión.

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